La Mona Lisa más que un clásico es un icono. Lo bien sabía Andy Wharol, en los iconos puedes apoyarte tranquilo, porque ellos solos ya ponen a todos en su lugar.
Pintarla muchas veces muy seguido, en un intento ingenuo de descifrar el misterio de la pintura más famosa del mundo, terminaron haciendo una serie que me gusta recordar.